Tarjeta roja para el que me moleste.

tarjeta roja

Ya os he contado alguna vez los problemas que nos surgen en el día a día viviendo en Inglaterra, sobre todo  a mi hijo de 5 años que aterrizó hace 9 meses aquí sin tener ni idea de inglés. En Chile, varios meses antes de venir, contratamos a una chica joven que había estudiado en un colegio nativo para que jugara con Rocío y Nico en inglés y se fueran acostumbrando al vocabulario. Rocío se unió desde el principio al juego, pero Nico no mostraba el menor interés por aprender el nuevo idioma.

Esa falta de interés no ayudó mucho a la adaptación de Nico en Inglaterra, que desde que pisó el primer día el colegio se mantuvo en sus trece de hablar español con compañeros y profesores. Como consecuencia, su integración fue más lenta de lo normal.

Tanto el colegio como nosotros hemos estado trabajando para que sea más fácil esta integración, como ya os conté cuando hicimos los emoticonos para que pudiera comunicar a las pofesoras como se sentía. Pues ahora le han dado una tarjeta roja (que lleva siempre en el bolsillo del pantalón).

Nico y su tarjeta roja

Muchas veces, cuando recogía a Nico del cole, estaba frustrado y me contaba lo que le había pasado en el día. Me decía que le habían puesto en «time out», o sea que le habían castigado, cuando se había defendido de algún niño que le molestaba. 

Si le quitaban un juguete, le llamaban «baby» o le empujaban, … él pegaba o empujaba. Como la mayoría de las veces la profesora le pillaba cuando él lo hacía y además no sabía explicarle (en inglés) qué le había motivado a hacerlo, pues estaba día sí y día también más tiempo en «time out» que haciendo actividades.

<<Ya sé que mi hijo no es un Santo. Es un niño impulsivo, poco delicado y cabezota, pero no es agresivo>>

«Tolerancia cero» con la agresión entre compañeros.

El comportamiento de Nico que os he contado se había convertido en algo habitual para él. Con la política del colegio de tolerancia cero con la agresión a los compañeros, los castigos también. Las profesoras, por su parte, con este método no llegaban a controlar el foco de este comportamiento para que no volviera a ocurrir, hasta que después de hablar varias veces con ellas, se les ocurrió darle a Nico una tarjeta roja y nos escribieron en el cuaderno de comunicación lo siguiente:

– Buenas tardes, hoy le hemos dado una tarjeta roja a Nico que deberá llevar siempre en el bolsillo para que cuando un niño le moleste, la saque en alto y nosotras al verle iremos a ver qué ha ocurrido. Atentamente, Mrs Omar.-

Ahora Nico va más contento y confiado al colegio porque, si alguien le molesta, saca su tarjeta roja como si de un árbitro se tratara, je je.

En fin, parece que vamos superando poco a poco los inconvenientes que nos vamos encontrando.

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6 comentarios

  1. Anónimo dice: Responder

    Que bien Amparo me parece q es una buena idea que han tenido hasta el que el poco a poco se termitermine de habituar, cosa que ya verás q lo logrará…

    1. Made made in Spain dice: Responder

      Sí! este principio de curso ya está mucho más acoplado en la clase.

  2. Anónimo dice: Responder

    La idea es super buena … y a podría instaurar acá también. ..
    Ánimo… a Nico me imagino que le encantó lo de andar de árbitro. .luego te va a pedir un pito .

    1. Made made in Spain dice: Responder

      Je, je estaba encantado. Teníamos varias tarjetas por casa porque se nos olvidaba sacarlas del bolsillo antes de meter el pantalón a la lavadora. Un desastre

  3. Mucho ánimo! Nosotros estamos ahora en la adaptación a la inversa:adaptandonos a la vuelta a España desde Hong Kong. Me parece que los profes han sido muy creativos con la idea.Espero que pronto vaya mejor.Un saludo!

    1. Made made in Spain dice: Responder

      Gracias.
      La adaptación a la inversa también debe ser durilla. Volver otra vez a encajar en España con todo lo vivido. ¿Cómo lo llevan?