Este fue el tan esperado primer día en nuestra nueva casa. Teníamos ganas de sentir esa comodidad de estar en casa, aunque en la residencia nos trataron como Reyes.
Desde que Pepa se puso al mando de la cocina y les hizo caldo de pollo Nico come un montón, y es que echaba de menos los «fideitos».
Y luego … a cuidar el «pasto» que está medio muerto. Nico está encantado de echarle una mano a Pablo.
jajaja.que.gracioso.el.video.bs
Amparo eso es para que vea lo peligroso que es un niño con una manguera de agua, que risa…..muy bueno ….
Que mayor está Nico.
que bueno !!!!! es total el video.